Cultura

Monteagudo celebra su legado cultural con un homenaje a los maestros de la danza tradicional

El pasado 1 de junio se celebró en Monteagudo un emotivo acto de reconocimiento a los autores de las músicas y coreografías de las danzas tradicionales de la localidad. La jornada, organizada por el grupo Gaiteros de Monteagudo, destacó por la alta participación y el entusiasmo de los asistentes.

Juanjo Planillo Cardenal, uno de los principales impulsores del evento, explicó cómo surgió la idea de esta celebración: "Inicialmente, queríamos realizar esta jornada coincidiendo con el 30 aniversario del grupo de danzas hace cinco años, pero la pandemia nos obligó a postergarlo. Este año, aprovechando que casi cumplimos 20 años interpretando la música de las danzas de Monteagudo, decidimos finalmente llevarlo a cabo."

La jornada comenzó con un almuerzo a las 10 de la mañana que sirvió como punto de encuentro entre los gaiteros y los habitantes del pueblo. Asistieron gaiteros de diversas localidades como Alfaro, Pamplona, Artajona, Cascante y más. "La coordinación fue todo un reto, pero al final conseguimos reunir a 38 gaiteros," comentó Juanjo.

Después del almuerzo, se realizó una charla sobre la recuperación de la danza y la música de Monteagudo, con la participación de José Luis y Elena Freyle, responsables de la música, y José Luis Balmá y Juan Sainz de Muga, quienes trabajaron en las coreografías y en la investigación histórica del paloteado tradicional.

El evento continuó con un alarde de gaiteros por todo el pueblo, seguido de una representación de las danzas de Monteagudo, interpretadas tanto por los autores de las músicas como por los gaiteros de Tudela. "Fue un momento muy emotivo ver a los actuales y antiguos miembros del grupo de danzas bailando juntos," recordó Juanjo.

La implicación de los vecinos de Monteagudo fue fundamental para el éxito del evento. "Todo el pueblo colaboró, desde preparar el almuerzo hasta servir la comida y organizar las mesas. Fue un verdadero esfuerzo colectivo," destacó Juanjo.

La jornada concluyó con una comida para todos los gaiteros y colaboradores, un café concierto a cargo del grupo Gaita Brass de Artajona, y una ronda de gaiteros por las peñas de Monteagudo, finalizando con una merienda y una sesión de DJ que se prolongó hasta las cinco de la mañana. "Fue un día genial, toda la gente estaba encantada," afirmó Juanjo.

Mirando al futuro

Respecto a las nuevas generaciones, Juanjo comentó que aunque hay jóvenes interesadas en las danzas, la afluencia de chicos es menor y la enseñanza de la gaita es más complicada. "Hemos intentado varias veces que los jóvenes se unan, pero es un instrumento difícil que requiere mucha práctica. Sin embargo, seguimos abiertos a enseñar lo básico a cualquier interesado," explicó.

El acto no solo celebró el pasado y presente de las danzas y músicas de Monteagudo, sino que también buscó asegurar su futuro, fomentando la participación y el interés de las nuevas generaciones. Con eventos como este, Monteagudo demuestra su compromiso con la preservación de su patrimonio cultural y musical.