Informe Draghi

Se han realizado múltiples análisis del denominado “Informe Dragui”, comentando los inconvenientes económicos que tenía el mismo. El objetivo de estas líneas es profundizar en todo ello aportando ideas del campo de la psicología, estadística, historia o sociología. En definitiva, Economía de la Conducta como complemento de la Economía tradicional.

Vamos a utilizar el diagnóstico que Josep Borrell, vicepresidente de la Comisión Europea y recientemente galardonado con el II Premio Internacional Navarra Puerta de Europa, hizo en Brujas en el año 2022: “Europa es un jardín. Es la mejor combinación de libertad política, prosperidad económica y cohesión social que la humanidad ha podido construir. La mayor parte del resto del mundo es una selva y la selva podría invadir el jardín. Los jardineros tienen que ir a la selva”.

Dragui confirma esta afirmación con diversos datos: nuestra productividad es un 20% inferior a la de Estados Unidos, la renta disponible de los hogares ha crecido en Norteamérica el doble que en Europa desde el año 2000, de las 50 mayores empresas mundiales sólo 4 son europeas, mientras que allí las tres empresas que más invierten en investigación y desarrollo están relacionadas con el ámbito digital (Alphabet, Meta, Microsoft) aquí lo están con el ámbito del automóvil (Wolkswagen, Mercedes, Bosch).

Nadie discute que es prioritario simplificar la regulación. Totalmente de acuerdo. Problema: el puesto de trabajo de los que se dedican a regular. ¿Cómo gestionar eso? Es muy difícil entender algo si tu sueldo depende de que no lo entiendas. Otro aspecto adicional: recordemos todas las movilizaciones y reivindicaciones existentes relacionadas con el sector primario que se han dado en la Unión Europea. Algo que siempre han reclamado quienes trabajan en este sector (y otros) es que no se les escucha. ¿Por qué no se tienen más en consideración sus peticiones? Es inaudito: tiene más peso la opinión de un lobby que la de los agentes económicos afectados.

Otro tema que no se afronta con suficiente rigor es la brecha existente entre las instituciones y la sociedad. ¿Cómo involucrar a las personas en la reestructuración de la democracia? ¿Cómo alienar el comportamiento humano, muchas veces impredecible y caótico, con las reformas constitucionales? Da la sensación de que el alejamiento que tienen estos políticos respecto de la “calle” es cada vez mayor. El “Nuevo Realismo” es una rama de pensamiento cuya tesis central es que la realidad es independiente de las construcciones sociales humanas. Demasiadas veces parece que los teóricos de los informes se han quedado en las construcciones, no en el mundo real.

Se plantea profundizar en el mercado único. Muy difícil. Los políticos locales no lo desean. Ejemplo claro: la frustrada compra de Talgo por Magyar Vagon (empresa húngara). Justificación: motivos estratégicos y de seguridad nacional.

Se desean empresas fuertes. Complicado. Pueden dañar la competencia interna de los países. Ejemplo claro: las trabas por parte del Gobierno a la adquisición del Banco de Sabadell por parte de BBVA.

La solución: un gasto de 800.000 millones de euros. Casi nada. Increíble, cómo ha cambiado el relato. Antes lo que se llevaba era la austeridad. El Consenso de Washington, aplicado en muchos países a finales del siglo pasado, les reclamabaestabilización macroeconómica, liberalización de la economía, menos Estado y libertad de mercado. Era la “receta” propuesta por el Fondo Monetario Internacional para cualquier país en situación de crisis, independientemente de sus características concretas. Ahora se propone lo contrario. No es de extrañar para muchos la economía sea más esoterismo que ciencia. Todavía hay más. ¿Cómo realizar este gasto? Dos problemas. Uno: el uso reciente de los fondos Next Generation no presagia nada bueno. Dos: inexistencia en el debate social sobre el mejor uso posible del dinero público. 

Respecto de la financiación, dos aspectos. Uno, más deuda. ¿Quién va a ganar más dinero? El sector financiero. Dos, más impuestos. Eso aumenta el poder del político y del funcionario disminuyendo así la influencia de sociedad civil. Existen instrumentos como las deducciones reembolsables que están infrautilizados. No hay duda: debería existir más integración entre las prestaciones y los impuestos directos.

China y Estados Unidos tienen muy claro lo que quieren. Buscan autosuficiencia y dependencia de Occidente respecto de sus suministros. Cada uno a su manera, de forma más o menos directa o indirecta. Si alguien tiene claro lo que desea hacer, no debería ser tan difícil buscar un cómo. ¿Nosotros lo sabemos?

Para terminar, China ha retrasado la edad de jubilación por primera vez desde el año 1978. Cuando Emmanuel Macron intentó lo mismo casi lo echan de Francia. La sociedad europea está muy acomodada. Un ejemplo claro: hay muchísimo absentismo laboral. Solución: si alguien está de baja, que cobre un 20% menos. Es un incentivo ideal para volver antes al trabajo y tiene lógica: enfermos no gastamos tanto.

¿Se atreve algún partido a proponerlo?