Los mortales que vivimos fuera del Olimpo de la Cultura nos sentimos en muchas ocasiones alegres al saborear las ambrosías emanadas de tan augusto lugar.
El legado cultural de Navarra, este pasado reciente, ha dado lugar a obras colosales que habrán deleitado a tantas personas como a quien esto escribe. Gracias al servicio en línea llamado Biblioteca Digital Navarra (BiNaDi), cada año nos vamos encontrando en versión digital cantidad de aquellas obras. Este repositorio documental, operativo desde 2007, crece anualmente en contenido y usuarios, realizando una tarea excelente, acorde a los tiempos. Mejor que glosar sus virtudes, es visitarlo.
Y como en esta nueva etapa me he propuesto ser breve en mis comunicados, iré al tema que son dos incorporaciones recientes que BiNaDi ha realizado.
Los que vivíamos en las cavernas durante la Prehistoria de la actual Era Digital, es decir, en esos lugares llenos de libros llamados "bibliotecas", conocimos una colección llamada "Navarra. Temas de Cultura Popular" (TCP) que apareció con fuerza en los años 70 del siglo pasado. La entonces Diputación Foral de Navarra comenzó una serie de publicaciones, a caballo entre lo cultural y lo turístico, impregnadas de un fuerte sabor divulgador. Era una especie de "Wikipedia analógica", si es lícita la comparación. Realmente creo que estas publicaciones, 400 números, estaban más en la estela de la deliciosa serie francesa de "Que sais-je?" en versión foral. Y Zeus me ampare por comparar a David con Goliath. La francesa, aún vigorosa y fresca, que alcanza miles de números, nació en 1941. Siempre tiene 128 págs. Los TCP, que ya finalizaron su etapa, tenían siempre 32 págs. Y aún mantienen vigor y frescura muchos de sus números.
Abreviando, señalar la segunda incorporación: el Catálogo Monumental de Navarra. Sí. Los 5 tomos, los 9 volúmenes. Quienes se hayan ahorrado el gimnasio diario levantando sus páginas, sabrán bien de qué hablo. Para los más desconocedores, decir que esta obra, una referencia en su día, fue la catalogación patrimonial de las cinco merindades de Navarra. Llevó 20 años su elaboración y todavía está lozana y tersa.
No duden que sigo disfrutando los aromas emanados de las publicaciones en papel, de Archivos y Bibliotecas perfumados por tintas y encolados de antes. Pero sin duda la digitalización tienes grandes ventajas y es para felicitar al servicio de BiNaDi por la incorporación de todas estas publicaciones. Habrá que seguir atentos a sus novedades.
¡Feliz semana!
